Algo grandioso que el Islam estableció, es que la familia no se limita solamente a los padres y a sus hijos, sino que se extiende albergando los lazos de parentesco de entre los hermanos, las hermanas, los tíos, las tías y sus hijos e hijas; ya que todos tienen el derecho al buen tratamiento y al mantenimiento de los lazos que el Islam incita a mantenerlos; pues considera estos derechos de los principios de las virtudes morales y promete recompensar por cumplirlos con la mayor recompensa, así como amenaza a quien corta los lazos de parentesco con el mayor castigo. Por ende, quien mantiene los lazos de parentesco, Al-lâh (Glorificado Sea) Mantiene Su relación con él, y quien los corta, Al-lâh (Glorificado Sea) la Corta con él.

   Además, el Islam estableció reglamentos y sistemas que implican mantener los lazos fuertes entre la familia extendida, incluso los parientes; de modo que se solidarizan y se apoyan entre sí, como estableció el sistema de los gastos, de la herencia y del ‘Aqilah; lo cual es repartir el Dîah [recompensa que se paga a la familia del matado] por asesinato tanto por error como el semi-intencionado entre el asesino y su familia.[1]

Desde un comienzo, mantener los lazos de parentesco, significa tratar bien a aquellos parientes, hacerles llegar el bien y protegerlos del mal según lo posible; eso incluye visitarlos, preguntar por ellos, ofrecerles regalos, dar limosna al pobre de entre ellos, visitar al  enfermo, aceptar sus invitaciones, recibirlos, apoyarlos, elevar su posición y también compartir sus alegrías y tristezas, aparte de otras cosas que aumentan y fortalecen los lazos entre los individuos de esta sociedad pequeña.

Entonces es un gran acto de bien, donde se fortalece la unión de la sociedad islámica y su integración, y las almas de sus individuos se llenan de tranquilidad y sosiego; ya que así la persona siempre se queda lejos de la soledad y del aislamiento y está segura de que sus parientes la rodean con el amor y el cuido, apoyándola si hay necesidad.

  Al-lâh (Glorificado Sea) Ordenó hacer el bien con los parientes, pues Dice [traducción del significado]: {Adorad a Al-lâh y no Le asociéis nada. Sed benevolentes con vuestros padres, parientes, con los huérfanos, pobres, vecinos parientes y no parientes, el compañero, el viajero insolvente y con vuestros esclavos. Al-lâh no Ama a todo arrogante jactancioso.}[2].

También Al-lâh (Glorificado Sea) Ha hecho que el acto de mantener los lazos de parentesco implica que Él Mantenga Sus lazos con la persona (quien los mantiene con sus parientes), y Sigue otorgándole Su bien y bondad, como lo indica el Hadiz Qudsi narrado por ‘Abdur-Rahmân ibn ‘Auf (que Al-lâh Esté complacido con él), pues dijo: “Escuché al Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) decir: “Al-lâh Dijo: “Soy Ar-Rahmân (el Misericordioso), y ellos [Es decir, los lazos de parentesco] son Ar-Rahim [su nombre en árabe].  Su nombre es derivado de Mi nombre; de modo que quien los mantenga, Mantendré mis lazos con él, y quien los corta, Cortaré mis lazos con él.””[3]          

También el Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) albrició a quien mantiene los lazos de parentesco por la abundancia del sustento y la bendición en la edad. Anas ibn Mâlik (que Al-lâh Esté complacido con él) narró: “Escuché al Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) decir: “Quien quiere tener un sustento abundante o una larga vida, que mantenga los lazos de parentesco.”[4]     

Los ‘Ulamâ’ (Pl. de ‘Alim, erudito) interpretaron esto diciendo que dicha abundancia se refiere a la bendición en la edad, la guía a las obediencias y ocupar su tiempo con lo que le sirve en la Otra Vida y le protege de perderlo en otra cosa.[5]

Por otro lado, existen textos de significado explícito que advierten de cortar los lazos de parentesco y lo consideran un pecado grave; ya que esto rompe los lazos entre la gente, difunde el odio y el rencor y lleva a la desintegración familiar entre los parientes, pues Al-lâh (Glorificado Sea) Dice advirtiendo de la maldición que tendrá lugar y la pérdida de la perspicacia [traducción del significado]: {Si no obedecéis, corromperéis la Tierra y cortaréis los lazos familiares. ¿Acaso esto os agrada? Éstos son a quienes Al-lâh Ha maldecido haciendo que se comporten como sordos y ciegos.}[6]     

Además, Yubair ibn Mut‘am (que Al-lâh Esté complacido con él) narró: “El Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) dijo: “No ingresará al Paraíso quien corta los lazos de parentesco.”[7] Y cortar los lazos de parentesco significa abandonar la unión, la piedad y el buen tratamiento con los parientes. Hay muchos textos sobre la gravedad de este pecado.

   Sin duda, este acto (de mantener los lazos de parentesco) tiene como objetivo crear una sociedad cooperativa, armoniosa e integrada, donde se realiza lo que el Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) dijo: “El ejemplo de los creyentes en cuanto a su amor mutuo, misericordia y afecto es como el del cuerpo, que cuando un miembro suyo sufre, el resto del cuerpo se unirá a él permaneciendo despierto y sufriendo fiebre”[8]

[1] Yûsuf Al Qaradâui, Al Islam Hadârat Al Gad [El Islam es la civilización del futuro], pág. 185.

[2] [Corán 4:36]

[3] [Abû Dâûd (1694)] [Ahmad (1680)] [Ibn Hibbân (443)] [Al Hâkim: Sahîh (7265)]

[4] [Al Bujâri (1961)(5639)] [Muslim (21)].

[5] Consulte: An-Naûaûi, Al Minhây Fi Sharh Sahîh Muslim ibn Al Hayyây 16/ 114.

[6] [Corán 45:22-23].

[7] [Al Bujâri (5638)] [Muslim (19)].

[8] [Al Bujâri (5665)] [Muslim (2586)].

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