Short Description
Nació en la ciudad de Allahabad en la India. Fue detenido varias veces a causa de su activismo en la liberación nacional
Nació en la ciudad de Allahabad en la India. Fue detenido varias veces a causa de su activismo en la liberación nacional. Escribió varios libros sobre historia, política y sobre los asuntos de la India. Se considera uno de los líderes más importantes de su época y uno de los caudillos del movimiento de independencia de la India. Fue el primer jefe de Estado en la India después de la independencia. Ocupó dicho cargo desde el 15 de agosto de 1947 hasta su fallecimiento. Fundó junto con Gamâl ‘Abd An-Nasir, Sukarno y Tito el Movimiento de Países No Alineados. Tuvo una sola hija llamada Indira Gandhi, quien luego llegó a ser primera ministra.
Vislumbres de la historia del mundo [Glimpses of World History]
De pastorear el ganado a dirigir las naciones
Nehru habla sobre la confianza del Profeta Muhammad (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) en sí mismo y en su Mensaje diciendo “A través de esta confianza y esta fe proporcionó a su nación los motivos del poder, la dignidad y la fuerza, y transformó a sus seguidores de habitantes del desierto a señores que conquistaron la mitad del mundo conocido en aquel tiempo. La confianza y la fe de los árabes eran grandes, aparte de que el Islam les agregó el mensaje de la hermandad, la igualdad y la justicia entre todos los musulmanes. Y de tal manera nació en el mundo un nuevo principio democrático”[1].
Una oportunidad de oro
“Muhammad (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) repugnaba -como los fundadores de las otras religiones- muchas de las costumbres y tradiciones comunes de su época. Y la religión, que él propagó -por su facilidad, forma explícita, hermandad y equidad- atrajo a la gente de los pueblos vecinos, debido a que saborearon la injusticia a manos de los reyes autócratas y los sacerdotes dictadores. La gente se había cansado del sistema antiguo y aspiraba a un sistema nuevo, y por lo tanto el Islam representaba una oportunidad de oro para ellos, ya que reformó muchas de sus condiciones y eliminó la pesadilla del agravio y de la opresión”[2].
De las maravillas de la historia
“Y lo extraño de verdad es observar que este pueblo árabe –que permaneció olvidado durante varios siglos y alejado de lo que sucedía a su alrededor– de repente se despertó y saltó con gran entusiasmo asombrando al mundo y volcando su realidad. La historia de la extensión de los árabes en Asia, Europa y África, así como la sublime civilización y la urbanidad floreciente que ellos presentaron al mundo, ¡son una de las maravillas de la historia! El Islam fue el incentivo y la idea para este despertar árabe, por la confianza y el entusiasmo que inspiró a sus seguidores”[3].
La magia del Islam
“La confianza y la fe de los árabes eran grandes, aparte de que el Islam les agregó el mensaje de la hermandad, la igualdad y la justicia entre todos los musulmanes. Y de tal manera nació en el mundo un nuevo principio democrático. Y si comparas[4] el Mensaje islámico que incita a la hermandad con la condición disoluta del cristianismo, sabrás cuánta es la magia y la influencia de este Mensaje, no solamente sobre los árabes, ¡sino sobre todos los pueblos de las tierras alcanzadas por los árabes!”[5].
La verdadera democracia islámica
“Abû Baker y Omar (que Al-lâh esté complacido con ellos) eran dos hombres grandiosos y establecieron el fundamento sobre el cual fue erguida la gloria de los árabes y de los musulmanes. Eran dos califas que tenían tanto el poder temporal como la autoridad religiosa[6], pero que -a pesar de la grandeza del cargo y de la fuerza del Estado- se despegaron de los goces mundanos; incluso del lujo y de la grandeza. Así, ésta es la verdadera vida democrática islámica que fue puesta en práctica por ambos califas”[7].
Pura mentira
“Los árabes pasaron de una conquista a otra, y muchas veces ganaron en las guerras sin combate. Y en 25 años tras el fallecimiento del Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam), los árabes conquistaron todas las tierras de Persia, Siria, Armenia, una parte de la región central de Asia Oriental, Egipto y una parte del Norte de África. Conquistaron Egipto fácilmente, ya que este país sufrió mucho de la tiranía del imperio romano y de las guerras sectarias. Fue divulgado que los árabes quemaron la Biblioteca de Alejandría, pero ahora se cree que esto es una pura mentira, ya que los libros para los árabes tienen un gran respeto que les impide cometer tal comportamiento bárbaro. Y quizá el emperador Teodosio –el emperador de Constantinopla – del cual hablamos anteriormente– fuera el responsable de esta ruina o de una parte de ella, ya que no estaba de acuerdo con los antiguos libros paganos griegos, que albergaban mitos y filosofías griegas antiguas. Además, una parte de la Biblioteca fue quemada mucho tiempo antes de eso, durante el asedio de Julio César de Alejandría”[8].
Mucha diferencia
“Concluyo este mensaje diciendo los árabes al comienzo de su despertar estaban muy entusiásticos por su creencia, y a pesar de eso eran tolerantes, porque su religión, en varias ocasiones, les ordena tolerar y perdonar. Omar ibn Al Jattâb (que Al-lâh Esté complacido con él) cuidó mucho mantener la tolerancia al entrar en Jerusalén, y en cuanto a los musulmanes de España, ellos dieron a la gran comunidad cristiana una plena libertad para su práctica religiosa. También, los musulmanes tuvieron con la India –el país del que no dominaron sino el Sind- lazos de amistad. Y la verdad es que lo que más distingue este periodo es la gran diferencia entre la tolerancia de los árabes musulmanes y el fanatismo de los cristianos europeos”[9].
Un rayo de esperanza
“Aquellos ingenuos árabes aparecieron sublimes en su mundo, y frente a su avance constante y victorioso se sometieron los enormes ejércitos y los príncipes. Y debido a que los otros pueblos estaban hartos de sus príncipes, los árabes representaron un rayo de esperanza para estos pueblos que esperaban la salvación y la revolución social”[10].
Bagdad… La ciudad de las Mil y Una Noches
“La ciudad que prosperó en la época de los califas abasíes fue la ciudad de las Mil y Una Noches. Era una ciudad extensa, llena de palacios, tiendas públicas, escuelas, facultades, mercados, parques y jardines. Sus comerciantes establecían transacciones con los países orientales y occidentales. Tenía un enorme ejército de funcionarios que vigilaban todas las partes del imperio, y cada vez que los asuntos de la administración se complicaban, la misma se dividía en sub-administraciones. Además, todas las partes del imperio estaban vinculadas con la capital a través del sistema de correos, y los hospitales se extendieron. Bagdad recibía visitas de gente procedente de diferentes lugares del mundo; y sobre todo la visitaban los eruditos, los buscadores del conocimiento y los artistas, y los califas acogían bien a los eruditos y los artistas”[11].
Los padres de la ciencia moderna
“Se observa que el estilo científico no estaba aplicado en los países del mundo antiguo como Egipto, China, La India y Roma, mientras que en Grecia se practicaba poco. No obstante, los árabes se distinguían por este espíritu científico exploratorio, lo que les hace ser llamados merecidamente “los padres de la ciencia moderna”. Pues, aprendieron de La India algo de la medicina y de las matemáticas, las disciplinas cuyos especialistas visitaban a Bagdad en grandes números, mientras muchos estudiantes árabes se dirigían a Taskent en el norte de La India, donde había una universidad grande de Medicina. Los libros médicos sánscritos y otros temas fueron especialmente traducidos a la lengua árabe. Por otra parte, los árabes aprendieron de China la fabricación del papel y otras cosas. Y de esta forma, los árabes establecieron sobre esta base científica –que aprendieron de otros- investigaciones grandiosas y alcanzaron unos descubrimientos grandes. Así pues, fabricaron la primera lupa y la primera brújula, y sus primeros médicos y cirujanos tuvieron una fama mundial que se divulgó por toda Europa”[12].
Bagdad, Córdoba y sus alrededores
“Bagdad era el centro de esta radiación intelectual, mientras Córdoba, la capital de la España árabe, era parecida a Bagdad pero en el occidente. También, en el mundo árabe, había otros centros científicos donde las ciencias florecieron, de los cuales El Cairo, Basora y Kufa. No obstante, Bagdad -la cual fue descrita por uno de los historiadores por ser “la capital del Islam, el ojo de Iraq, el corazón del Imperio y el centro de la belleza, la cultura y el arte”- sobrepasó todos estos centros, teniendo en cuenta que la población de Bagdad pasó un millón de habitantes, es decir, mucho más que los habitantes de Calcuta o Bombay hoy en día[13]”[14].
Córdoba la grandiosa
«El hecho de que los árabes gobernaron partes de España a lo largo de 700 años es algo que provoca admiración que se incrementa más por aquel urbanismo sublime y por la alta cultura árabe descritos por un historiador diciendo “Los marroquíes organizaron el gran reino de Córdoba, que era el orgullo de la Edad Media y que portó la bandera de las ciencias y de la civilización floreciente al mundo occidental, el cual estaba sumergido en la ignorancia y la barbaridad”.
» -Córdoba siguió siendo la capital del reino de los árabes durante 500 años, sus habitantes pasaban 1.000.000 de habitantes, tenía huertos y jardines resplandecientes con extensión de 10 millas y un suburbio que se extendía a lo largo de 24 millas. Y se dice que albergaba 60.000 palacios, 200.000 casas, 800.000 comercios, 3800 mezquitas, 700 baños públicos. Y pese a la exageración percibida de estos números, nos dan una imagen acerca de la grandeza de esta ciudad, donde abundaban las bibliotecas como la biblioteca del príncipe que incluía 40.000 tomos. Por otro lado, la Universidad de Córdoba tenía una gran fama, y la ciudad también estaba repleta de las escuelas primarias gratuitas para los pobres.
-Un historiador escribió diciendo “Mientras la mayoría de los habitantes de Córdoba sabían leer y escribir, los pueblos cristianos de Europa vivían en una plena ignorancia excepto los sacerdotes, y no se salvaron de dicha ignorancia ni siquiera las clases europeas más altas”.
-Esta es la grandiosa Córdoba, la rival de Bagdad. Tenía una gran fama en todas las partes de Europa a tal grado que los escritores alemanes la llamaron “la perla del mundo”. Y los estudiantes de los diferentes lugares del mundo se dirigían hacia su universidad, la cual publicó la filosofía árabe haciéndola llegar hasta las mayores universidades de Europa»[15].
[1] Jawaharlal Nehru, Vislumbres de la historia del mundo, pág. 26
[2] Ibíd., pág. 27
[3] Ibíd., págs. 23-24.
[4] Este libro se compone originalmente de mensajes dirigidos de Nehru a su hija durante el periodo de su encarcelamiento en los treinta del siglo pasado, y los mensajes que hablan sobre la época islámica fueron escritos en el año 1932 d.C.
[5] Jawaharlal Nehru, op. cit., pág. 26
[6] Los califas en el Islam no tenían una autoridad religiosa como la conocida en el cristianismo en la era medieval.
[7] Jawaharlal Nehru, op. cit., pág. 26
[8] Ibíd., pág. 27
[9] Ibíd., pág. 31
[10] Ibíd., pág. 33
[11]Ibíd., pág. 34
[12] Ibíd., pág. 35
[13] Escribió este libro a mediados del año 1932 d.C.
[14] Ibídem.
[15] Ibíd., págs. 45-46.
Comentários
Envie o seu comentário